COVID-19 Y LOS PRESOS


Una situación inquietante para la sociedad se generó a partir de la difusión de la noticia de una suelta masiva de presos. Sin dudas, hay sectores que utilizan este tipo de episodios para obtener rédito político, sin tener en cuenta la bajeza que eso significa.Tal como sucede en todo sistema democrático, la base se constituye con tres poderes: Ejecutivo, Legislativo y Judicial. Pero el que tiene decisión e incidencia directa sobre una determinación de este tipo, es la (in) justicia.
Y precisamente en el marco de debates interminables, donde algunos periodistas y “especialistas” especulan con derivaciones y posibles “síndrome de Estocolmo”, los representantes de la (in) justicia permanecen callados, tratando de pasar desapercibidos y que la sociedad olvide que ellos son un sector con sueldos de privilegio y jubilaciones de escándalo, que NO PAGAN IMPUESTOS NI GANANCIAS.
La sociedad debe saber que si algún condenado por hechos aberrantes queda libre, es por decisión de la (in) justicia, que distraídamente intentará que la responsabilidad recaiga en otro poder.
Los condenados deberán permanecer en sus lugares de detención, a excepción de una serie de factores que han sido establecidos por la (in) justicia que de ahora en más, deberá hacerse cargo de sus decisiones, porque en propio presidente de la Nación fue contundente cuando dijo que no comparte ni firmará ningún “indulto”.


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