La corrección que habría que aclarar al intendente
Luciano Dinápoli es que el “aislamiento” no es “voluntario”, porque a ningún
vecino le preguntaron si estaba de acuerdo y de pronto llegaron decenas de
personas con trajes especiales a sugerir a los vecinos que se quedaran en sus
viviendas, mientras ambulancias y patrulleros circulaban lentamente por los
alrededores.
Sería importante que además de chequear la salud de los
vecinos en un intento por detener el
virus, se fijaran en las necesidades prioritarias de un barrio que tiene muchos
más habitantes que cualquier población pequeña del interior provincial. En el
barrio Río Atuel viven más de 2500 personas de todas las edades en la extensión
de 3 manzanas.
Y si el intendente estuvo en el comienzo del operativo,
sería interesante preguntarle qué opina del estado de los desagües cloacales
que hace meses colapsaron y las aguas servidas corren como algo “natural” por
la calle Corona Martínez, colapsada por baches gigantes que motivaron que no
circule más el transporte público y no es de ahora. En un intento de solución
transitoria, una bomba que funciona durante las mañanas con la contaminación
sonora a la que no se acostumbra nadie.
Tal vez es hora que se tome el toro por las astas y se
prioricen las obras, porque esas falencias, son focos infecciosos que juegan a
favor del Covid-19 y es algo que no se puede soslayar ni minimizar con promesas
de futuros emprendimientos. La gente está viviendo en esas condiciones aquí y
ahora… desde hace meses.
No alcanzó con la buena voluntad de un vecindario de
trabajadores que cumplieron con la cuarentena, con el aislamiento, con el uso
de tapabocas, con el distanciamiento social pero con eso, no alcanza y si no se
dan soluciones definitivas, estaremos expuestos al covid y a todas las pestes
estacionales.
POBRE GENTE TODO LO QUE ESTAN PASANDO LAS CLOACAS QUE ES UN FOCO DE INFECCIÓN MAS LOS DEL VIRUS
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