El reconocimiento a un acto de heroísmo al ex gobernador Aquiles Regazzoli en los albores de la dictadura, se desarrolló en el barrio que lleva su nombre al sur de la capital pampeana y fue considerado como “el primer acto de resistencia”, cuando se decidió la entrega de llaves de las 80 casas del barrio, en el marco de los 45 años del golpe.
El acto contó con la presencia del vice gobernador Mariano Fernández, el
intendente Luciano di Nápoli, la secretaria administrativa del Senado María Luz
Alonso y familiares de “Don José” y un buen marco de público.
En el acto se recordó el hecho que se vivió el 24 de marzo de 1976. En
las primeras horas de la mañana, ya instalado el golpe en todo el país, el
entonces gobernador Aquiles José Regazzoli decidió la entrega de llaves
de un barrio que ya estaba listo por lo que llamó a su despacho a Alicia
Chávez, una joven militante de la Juventud Peronista y empleada administrativa
del IPAV, y le pidió que entregara las llaves del barrio Peñi Ruca (nombre
original) a sus legítimos adjudicatarios.
Chavez que no participó del acto
por estar aislada se jugó la vida y fue hasta la oficina del IPAV. Ante la
guardia policial que ya le impedía el ingreso, dijo que tenía autorización para
retirar unas llaves olvidadas y llegó hasta el tablero donde estaban las 80
llaves del barrio. Junto con Avelino Cisneros fueron hasta el barrio El Molino,
conocido también como El Salitral e instaron “a los vecinos a que por orden del
gobernador debían cambiarse ese mismo día hacia el nuevo barrio, sino perderían
sus casas” y se produjo el éxodo para llegar al barrio Peñi Ruca.
El diputado Leonardo Avendaño destacó que “en un clima de retroceso del
campo popular y el inicio de la peor de todas las represiones don José, teniendo
a su hija detenida, tenía en claro que tenía que hacer, que era tenderle la
mano al caído, estar con los más humildes y cumplir con el mandato popular.
Hasta último momento, estuvo pensando cómo a cada vecino le llegaba la llave”,
dijo.
El intendente di Nápoli también reivindicó la figura de Regazzoli y
resaltó que “jugándose la vida fue don José aquel 24 de marzo a la noche quien
mostró todo el liderazgo y la valentía que tienen que tener un verdadero
peronista”.
En el cierre Mariano Fernández saludó a «los
vecinos y vecinas de la república de don José Aquiles Regazzoli» y señaló que
«bien podríamos hacer una película de todo esto que se llame ‘Las 80 llaves’
que don José entregó en manos, arriesgando la vida suya».
También reivindicó la figura de Alicia, quien
sorteando «a todos los milicos, que el 24 a las 6 de la mañana ya estaban
parapetados en las oficinas públicas, y así pudieron birlar democráticamente
las llaves para entregárselas a cada propietario».
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