El gobernador de la provincia Sergio Ziliotto, presidió el acto oficial por el día de la Memoria y en su transcurso, se lo vio emocionado por el ralato de Fernando Pérez, un sobreviviente que mediante un crudo relato, contó las torturas recibidas a pesar de sus 8 años, quien destacó que su madre “Lila” Sotelo quería entregar el pañuelo blanco de Madres y Abuelas a Ziliotto el año pasado, lo que fue imposible por la cuarentena.
En ese marco, el
gobernador rompió el protocolo pues no estaba prevista su alocución y expresó “cuesta
agregar palabras después de lo que hemos vivido. Ese pañuelo que Felisa me quería
entregar personalmente va a ser una guía para fijar políticas públicas y
políticas de Estado fundamentalmente para tener memoria».
Luego se refirió a quienes después de 45 años
«siguen negando lo que pasó, que siguen diciendo que no son 30 mil los
detenidos desaparecidos y que los derechos humanos son un curro» y en tal
sentido aseveró “ofenden a quienes dieron la vida para luchar por causas justas
para que los trabajadores tuvieran una mejor vida y existiera la justicia
social».
Sobre el final destacó
que envió a la Cámara de Diputados una nueva Ley de Seguridad Ciudadana y
Seguridad Pública que tiene «una profunda raigambre y respeto a los derechos
humanos» y enfatizó “nos tenemos que hacer cargo en La Pampa y por eso uno de
los principales objetivos de este proyecto de ley es una reivindicación a
nuestros detenidos desaparecidos, porque no podemos olvidar que la Policía de
La Pampa fue colaboracionista del proceso de la noche oscura del 24 de marzo de
1976», finalizó.
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