Las historias que parecían lejanas, hoy están a la vuelta de la esquina, descriptas como sólo Eduardo Galeano sabe hacer y es algo que, al menos a los que creemos en la solidaridad… nos duele.
Querido diario. La señorita Ceci nos dijo que ahora que no nos vemos, anotemos todos los días lo que más nos importa.
Asi que me presento: Yo soy Juan. Tengo diez años. Soy de River, porque
mi papá es de Boca y no me quiero parecer a él.
Tengo una hermanita de tres años, que se llama Florencia y le decimos
Flor. Tengo una mamá que es una genia, se llama María Laura, pero no le gusta
el primer nombre asi que todos le dicen Lau.
Mi papá se llama Juan. A mí me pusieron Juan por él. Cuando sea grande
me voy a cambiar el nombre. Ahora no, porque Flor es muy chiquita y no lo va a
entender.
Cuando llega fin de mes, voy con mi mamá y mi hermanita a golpear las
manos en las casas lindas, y pedimos comida, porque con lo que gana mi mamá
limpiando en lo de la patrona, no nos alcanza. También a veces pedimos ropa.
Mi mamá lleva a Flor en el cochecito, porque camina lento y se cansa.
A veces nos separamos, yo voy por una vereda, mamá y Flor por la otra.
La gente siempre me pregunta lo mismo. Si estoy pidiendo solo. Si mi
papá trabaja. Si mi mamá me pega.
Siempre contesto que no estoy solo, que estoy con mi mamá, que mi papá
no se si trabaja o no porque se fue de casa y no lo veo, que mi mamá no me
pega.
A veces me dan comida, otras ropa,otras nada.
Hay gente que me da consejos. Algunos me dicen que vaya a la escuela,
otros que le diga a mi papá que trabaje.
Algunas señoras me miran con lastima, y algunos señores con bronca. Es
feo eso. Y me dá una re vergüenza.
Hoy fue raro. Una señora me preguntó como te llamas. Re raro. A nadie le
importa como se llama el pibito que pide.
Juan señora, le dije.
Me miró y sentí como cuando me mira mi mamá.
Escucháme Juan, te voy a dar fideos, pure de tomate, atun, y arroz. Pero
eso es para cocinar. Ahora tenés hambre?
Si doña! Un poco le dije, aunque tenía ganas de decirle que me comeria
cualquier cosa, hasta un pan solo.
Y que te gusta más, pepitos o chocolinas?
A mi las chocolinas, doña. A mi hermana las pepitos. Asi que si me va a
dar galletitas deme esas. Que yo como igual. La señora me dijo esperame un
cachito Juan. Ahi te traigo la bolsa. Y te voy a dar un alcohol en gel. Sabes
como se usa no?
Si señora! Le contesté. La seño nos explicó que hay que usarlo antes de
comer y de tocarnos la cara.
Genio Juan. La tenes re clara me contestó, entró a su casa y enseguida
salió con una bolsa donde se veia un paquete de fideos y en la mano un paquete
de pepitos y uno de chocolinas. Me dijo las choco para vos y las otras para tu
hermanita. Convidale a mamá. Y escuchame Juan, si mamá te dice que no tiene
hambre, dale igual. Las mamás a veces decimos que no queremos, pero nos
aguantamos para que los hijos coman más. Y a tu mami se la ve cansada. Con unas
galles va a estar mejor.
Me pasó la mano por la cabeza y me dijo chau Juan. Si otra vez andan por
acá pasá.
Fue re raro diario. Crucé enfrente y le conté a mamá. Y lo más raro fue
que le dije queres una galle má? Y me dijo no Juancito no tengo hambre. Comé
vos. Igual que como me dijo la doña.
Asi que le insistí y le dije, si vos no comes yo tampoco. Ahi recien
comió. Mientras Flor no paraba con las pepitos.
Cómo se llama la señora? me preguntó mamá. Y me di cuenta que no sabía.
Solo me aprendí la dirección por si otra vez se nos acaba la comida
Y porque hoy por primera vez me gustó mi nombre. Juan. No como mi papá.
Sino como yo. Juan, el que la tiene re clara y le convida chocolinas a su mamá.
Eduardo Galeano.
-Los nadies-
Si te cruzas con un niño que está en la calle ayudalo..... no des vuelta
la cara. Que el hambre no espera...
Que historia tan real... cuantos juan, Flor y mamá hay en esta Argentina agotada por las políticas erróneas.
ResponderBorrarPobrecitos estos niños!!! La vida es tan cruel!!!
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