Las mujeres rusas ven con buenos ojos venir a Argentina a dar a luz a sus hijos, no sólo por cuestiones de sobresaltos de la guerra, sino por las facilidades para inmigrantes y el excelente nivel de los establecimientos de salud, tanto privados como públicos.
Esto, que se constituyó en un verdadero fenómeno en 2022,
año en el que llegaron casi 2500 parejas, que obviamente pueden costear
pasajes, atención y alquileres, tiene una proyección para el flamante 2023 de
unas 10.000 mujeres rusas que llegarían al país con ese objetivo.
Como imaginarán, ya hay todo un mecanismo comercial que
brinda desde asesoramiento, traducción y servicio de alquileres de
departamentos en distintos barrios de CABA. Los bebés que nacen y se asientan como
de nacionalidad Argentina, le brinda al grupo familiar la facilidad de poder
ampliar al grupo el beneficio.
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